Ignacio Garrido ha aprovechado la tercera jornada del Abierto de Madeira para colarse entre los diez mejores sobre el campo de Porto Santo Golfe. Aunque le separan 10 golpes del líder y sus opciones de victoria quedan muy lejos, no salir de estas plazas cumpliría con los objetivos del madrileño.

A pesar de que el diseño de Severiano Ballesteros no quiso ponerle las cosas fáciles al de Somosaguas obligándole a anotar siete bogeys, el buen juego que está desplegando en las últimas semanas le ayudó a aguantar el tipo y rubricar seis birdies para un parcial de +1, que le elevarían ocho puestos en la clasificación del torneo.

Por su parte, Santiago Luna logró redimir en parte la mala vuelta de ayer para saldar el día con una tarjeta de 73 golpes.

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